Deseos

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Pensaba que me sentía mejor.

No recordaba qué es el deseo. Hace unos años dejé de desear y me dio tranquilidad, el punto negativo fue perder la creatividad y una magia extraña que da sentido a eso que vivía.

Pocas veces volví a desear a alguien con la misma intensidad. Tal vez me gasté el deseo, amé demasiado, todo quedó impregnado de recuerdos que no quería volver a vivir. Me sentí tranquilo por no desear más pero con un vacío grande.

El deseo trae consigo un brillo mágico o tal vez sea un empaque o una goma que nos separa de la realidad. Sí, es eso, una capa que evita fricción de nuestros cuerpos con la materia externa, en ese caucho está la creatividad; la magia que nos separa de una vida mecánica.

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Ángel Valdés-González
Ángel Valdés-González

Written by Ángel Valdés-González

Bienvenido a la colección de cosas absurdas. Bibliotecario.

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